El integrante de la junta vecinal del jirón Tacna de la ciudad Lacustre, Néstor Apaza, señaló que casi a diario observan la presencia de personas libando licor en las calles y parques, pese a la existencia de la ordenanza municipal número 021- 2018 que regula el horario de venta y consumo de bebidas alcohólicas en el distrito de Puno.
Mencionó que el alcalde Martin Ticona debería disponer que el personal de Serenazgo vigile los parques, pasajes y calles de la ciudad, para evitar la presencia de personas en estado de ebriedad. Además se debe hacer un control a las tiendas que expenden bebidas alcohólicas fuera del horario permitido.
Así mismo cuestionó la labor de los regidores, ya que hasta la fecha no se evidencia su trabajo de fiscalización; tanto en la ejecución de obras, como en la exigencia de cumplimiento de las ordenanzas y acuerdos municipales.
