Elaborado por: Viviana Curtihuanca Lima
Según el Sistema Informático Nacional de Defunciones, en la región Puno, hasta noviembre del 2024, se han registrado 464 muertes violentas, de ellas, 168 muertes por accidentes de tránsito, es decir, la mayor cantidad a nivel nacional, si se la compara con cifras de otras regiones con excepción de Lima.
Estos accidentes, muchas veces son ocasionados por la excesiva velocidad, fallas técnicas y/o humanas, consumo de bebidas alcohólicas, entre otros, por lo que la población siempre hace la exhortación a los conductores a manejar con mucho cuidado, pensando en el bienestar de los usuarios.
Son varios los accidentes que ocurren día a día, uno de los que conmocionó a la población puneña, sucedió la madrugada del 28 de mayo, en el que un taxista en presunto estado de ebriedad, atropelló a un trabajador de limpieza pública identificado como David Martin Quispe Apaza de 54 años, quien estaba a punto de terminar su turno de trabajo con el camión compactador de residuos sólidos en la Av. Simón Bolívar.
Debido al fuerte impacto, fue trasladado al Hospital Regional Manuel Núñez Butrón, en el que debido a la lesión, determinaron amputarle la pierna izquierda, por lo que pidió justicia y la máxima sanción para el conductor, que en el momento fugó del lugar.
Otro de los accidentes que lamentablemente cobró muchas vidas, fue denunciado por un preocupado padre de familia en el mes de noviembre, quien indicó que el bus de la empresa Amazonas, en la que se transportaba su hija, había partido de la ciudad de Juliaca con rumbo hacia Sandia, sin embargo, no había llegado a la hora prevista, por lo que junto a efectivos policiales emprendieron la búsqueda, encontrando que el vehículo minivan había caído a un barranco de aproximadamente 200 metros de profundidad a la altura del sector de Repisa.
La unidad vehicular estaba completamente destrozada, llegando incluso a la orilla del rio de la zona, mientras que, 11 personas fallecidas fueron encontradas a 200 metros hacia abajo y un menor de 4 años de edad, que fue el único sobreviviente, fue trasladado hasta el hospital de Sandia y posteriormente a Juliaca, por la gravedad de sus heridas.
Así como estos, otros accidentes más ocurrieron en diferentes pistas de la región, apagando la vida de adultos, jóvenes y niños, enlutando así a varias familias, es importante reflexionar frente a este problema, sobre todo por aquellos accidentes que se suscitan por consumo de bebidas alcohólicas o excesiva velocidad, los transportistas deben recordar que en sus hogares los espera su familia, así como a las personas que confían en su servicio para llegar con bien a reunirse con los suyos.