La central hidroeléctrica ya aporta al sistema eléctrico nacional, pero su puesta en marcha sin previo aviso ha generado malestar en autoridades locales, que exigen un convenio marco y una distribución justa del canon energético.
La Central Hidroeléctrica San Gabán III, ubicada en la provincia de Carabaya, ha iniciado operaciones sin ningún anuncio público ni ceremonia oficial, generando sorpresa e incomodidad entre autoridades locales y comunidades directamente involucradas en el proyecto.
Edmundo Cáceres Guerra, alcalde de la provincia de Carabaya, confirmó en entrevista con Radio Onda Azul que recién el lunes 9 de junio se recibió un documento oficial de parte de la empresa operadora, confirmando que San Gabán III ya se encuentra energizando y aportando al Sistema Eléctrico Interconectado Nacional (SEIN).
Detalló que, San Gabán III genera 209 megavatios, los cuales se suman a los 110 megavatios de San Gabán II, elevando a 319 megavatios el aporte energético del departamento de Puno al SEIN. La central cuenta con una presa con capacidad de embalse de 290,000 metros cúbicos de agua y tres compuertas hidráulicas.
Explicó además que, durante la fase de construcción, comunidades, distritos y la propia provincia participaron activamente en los procesos y acuerdos. Sin embargo, en esta nueva etapa de operación, ni las comunidades ni el municipio fueron informados oportunamente, lo que, según el alcalde, representa una grave omisión técnica y legal por parte de la empresa concesionaria Hidro Global, de capital chino.
“Después de energizar, recién enviaron un comunicado prohibiendo acercarse a las torres de alta tensión, amenazando incluso con denuncias. No se puede actuar así con comunidades que dieron su consentimiento y apoyo al proyecto desde el inicio”, afirmó.
En respuesta al malestar, la empresa ha convocado a una reunión con las autoridades locales y comunidades afectadas este sábado 14 de junio en Macusani. Uno de los temas centrales será la necesidad de establecer un convenio marco de cooperación que garantice beneficios sostenibles para las comunidades, como sucede en otros sectores como la minería. Asimismo, se abordará la escasa distribución del canon energético que, según Cáceres, apenas llega a las localidades generadoras.
“Por San Gabán II, el canon que recibe la región apenas llega a 12,000 soles, de los cuales la capital se queda con el 50%”, explicó.