El sindicato denuncia debilitamiento institucional, despidos injustificados y una administración con sesgo político que afecta la legitimidad de la entidad
El Sindicato de Trabajadores de la Defensoría del Pueblo expresó su rechazo a la actual gestión del defensor Josué Gutiérrez, acusándolo de conducir una administración que se aleja de los sectores más vulnerables y debilita la legitimidad de la institución.
En un pronunciamiento público, los trabajadores manifestaron su preocupación por el deterioro institucional, especialmente tras los recientes episodios de rechazo ciudadano en regiones como Puno y Cusco. Según el sindicato, la actual dirección ha adoptado un enfoque con «evidente sesgo político» que pone en riesgo la credibilidad construida durante años.
Los trabajadores también denunciaron una ola de despidos y remociones, señalando que primero fueron obligados a renunciar los adjuntos, luego los jefes de programas, y finalmente, casi todos los jefes de oficina a nivel nacional.
Ante esta situación, el sindicato hizo un llamado urgente al diálogo directo con Josué Gutiérrez y pidió la unión de todos los trabajadores para defender el rol fundamental de la Defensoría del Pueblo en la protección de derechos ciudadanos.
Fuente: La República
