Xi y Putin refuerzan su alianza estratégica en llamada telefónica tras investidura de Trump


Xi y Putin se reunen
Xi y Putin se reunen

Los líderes de China y Rusia acuerdan fortalecer los lazos bilaterales y cooperar frente a «incertidumbres externas», mientras observan de cerca el retorno de Trump a la Casa Blanca

En una videoconferencia celebrada este martes, el presidente chino Xi Jinping y su homólogo ruso Vladimir Putin destacaron la importancia de profundizar los lazos entre ambos países, llevando la relación bilateral a un nuevo nivel. La conversación se produjo horas después de la toma de posesión de Donald Trump como presidente de Estados Unidos, un evento que sigue siendo observado de cerca por Moscú y Beijing.

Ambos líderes se han reunido regularmente alrededor del Año Nuevo, fortaleciendo una relación personal que ha sido clave en la consolidación de una alianza estratégica entre sus naciones, la cual ha ganado terreno con el tiempo, especialmente después de que Rusia intensificara su guerra en Ucrania. Xi expresó su disposición a llevar las relaciones entre China y Rusia «a nuevas alturas» y destacó la necesidad de enfrentar las «incertidumbres externas» con una mayor «estabilidad y resiliencia» en los lazos bilaterales.

Putin, por su parte, elogió la expansión del comercio entre los dos países, que alcanzó cifras récord en 2024, y reafirmó su compromiso con un orden mundial multipolar más justo, desafiando el dominio de Estados Unidos en los asuntos internacionales. Los dos líderes coincidieron en la importancia de sus esfuerzos conjuntos para estabilizar la situación global.

La llamada se produce en un contexto geopolítico tenso, con la mirada puesta en la nueva administración estadounidense. Mientras Trump ha mostrado interés en restablecer relaciones con Rusia y China, aún no está claro qué enfoque adoptará en cuanto a las políticas internacionales y las tensiones con estos países. Aunque Trump ha expresado su admiración por Putin y Xi, también ha indicado que buscará concesiones económicas y diplomáticas para resolver conflictos globales, incluida la guerra en Ucrania.

La interacción entre los tres actores clave —Xi, Putin y Trump— podría dar lugar a un complejo triángulo diplomático, en el que Beijing y Moscú buscan consolidar su influencia, mientras Trump evalúa cómo equilibrar sus relaciones con ambos líderes. Los expertos anticipan que China podría desempeñar un papel clave en la mediación del conflicto en Ucrania, aunque esto podría requerir un delicado equilibrio entre sus relaciones con Rusia y sus intereses con Estados Unidos.