Economista advierte que el aumento de 340 mil servidores públicos en una década no ha mejorado servicios básicos, mientras persisten prácticas clientelistas y falta de meritocracia en el Estado
En entrevista con Radio Onda Azul, el economista Erick Chuquitapa, de la Red de Estudios para el Desarrollo, advirtió sobre el preocupante incremento del gasto en personal en el Estado peruano. Según datos de SERVIR, entre 2013 y 2023 la cantidad de servidores públicos aumentó en 340,000 personas, lo que ha hecho que la planilla pública represente actualmente el 33% del presupuesto nacional.
Explicó que, este incremento no ha venido acompañado de mejoras en la calidad de servicios como salud o educación, “de cada 100 soles del presupuesto, 33 se destinan a sueldos y obligaciones sociales, pero seguimos con indicadores preocupantes ya que solo el 40% de los escolares comprende bien lo que lee y el 43% de niños menores de cinco años padece anemia”, puntualizó.
También se abordó el caso reciente de la asesora congresal, Yessenia Lozano, (asesora de Cesar Acuña) con un sueldo de S/19,000, cuya maestría no cuenta con validación en SUNEDU. Esto, según el economista, refleja la falta de meritocracia en el sector público, “no se contrata en base a capacidades o experiencia, sino por favores políticos. Eso erosiona la institucionalidad del Estado”, afirmó.
Además, comparó el presupuesto del Congreso (alrededor de 1,413 millones de soles), con el destinado a inversión pública en regiones como Puno, que solo recibe 791 millones, “Se prioriza el gasto burocrático en lugar de cerrar brechas sociales en zonas rurales”, criticó.
Chiquitana, alertó sobre la alta rotación de personal, la ausencia de evaluaciones de desempeño y la contratación por confianza, especialmente en gobiernos locales y regionales. “No hay planificación ni criterios técnicos; se contrata sin tener en cuenta si se responde a las verdaderas necesidades del país”, remarcó.
Finalmente, propuso tres soluciones clave: recuperar la meritocracia, contratar personal donde realmente se necesita, por ejemplo, médicos y docentes en zonas rurales y evaluar el impacto real del gasto público. “Digitalizar procesos y exigir rendición de cuentas es fundamental para garantizar un Estado eficiente y al servicio de los ciudadanos”, concluyó.