Los padres obsesionados porque sus hijos pequeños sigan muchos cursos durante las vacaciones para mantenerlos ocupados, podrían generar en ellos cuadros de estrés y rechazo.
Así lo advirtió el psicólogo y psicoterapeuta del Instituto Guestalt, Manuel Saravia, quien sostuvo que los niños deben ser motivados con cursos en vacaciones pero también necesitan un tiempo para el descanso.
«Tiene que haber espacio para la actividad que el pequeño disfrute, otro para una actividad académica, también alguna actividad social y familiar, pero otro para el descanso», anotó el especialista.
Alertó a los padres a evitar sobrecargar a sus niños con muchos cursos «para que una experiencia que debería ser motivadora y enriquecedora se convierta en todo lo contrario y genere rechazo a seguir estudiando».
Como ejemplo Saravia dijo que si un niño quiere practicar fútbol en vacaciones, los padres pueden darle esa opción, pero también distribuir una parte del tiempo libre en una materia que necesita reforzar, como matemáticas. «Es decir te motivo con una actividad y con otra se le da refuerzo», señaló.
Fuente: Andina
